Por desgracia, cada vez son más las familias con problemas laborales y económicos, y yo me pregunto qué podemos hacer las/los demás.
Cuando yo era pequeña, la relación con los vecinos era casi como de familia.
En los pueblos se notaba más esa preocupación de unos por otros. Pero incluso en el bloque en el que yo vivía, en una gran ciudad, también había ese afecto entre vecinos (puede ser porque la mayoría procedían de los pueblos).
El caso es que había mucha confianza, siempre estábamos dispuestos a ayudarnos unos a otros y nos entristecíamos cuando algo malo le pasaba a alguien.
Hoy en día creo que se ha perdido eso.
No nos preocupamos por quienes tenemos más cerca.
Seguramente no conocemos a la mayoría de nuestros vecinos. Puede que nos crucemos con ellos en la escalera, un brevísimo saludo por cortesía y poco más. Puede que no sepamos ni cómo se llaman.
En nuestro afán por ser individuales nos hemos desentendido de quienes tenemos al lado.
Es posible que en nuestro propio edificio haya familias con problemas y ni siquiera lo sabemos (no quiero ni pensar que a lo mejor a alguien ni le importa...).
De una forma sutil, sin entrometernos demasiado en los asuntos de los demás, intentemos averiguar si alguno de nuestros vecinos no pudo comer ayer, si alguno está enfermo, si alguno está solo.
A lo mejor no nos cuesta mucho cocinar un poquito más de cantidad y guardar un plato de comida para alguien, o comprar mañana una barra de pan de más, o pararnos a hablar un ratito con esa vecina que parece que tiene ganas de conversación (quién sabe si esa será la única conversación que tenga en todo el día).
Si hace varios días que no vemos a algún abuelo de nuestra escalera, seguro que no nos cuesta nada llamar a su puerta y preguntar si está bien.
A veces ni siquiera es necesario hacer tanto. Muchas veces una sonrisa y una palabra afectuosa pueden ser de gran ayuda.
De Abu Said Al-Judrí (que Allah se complazca de él) se transmitió que dijo:
Estábamos en un viaje con el Profeta (la paz y las bendiciones de Allah sean con él), cuando llegó un hombre sobre su montura, volviendo su vista a derecha e izquierda. Y dijo el Mensajero de Allah (la paz y bendiciones de Allah sean con él): -Quien tenga una montura de más, que se la lleve a quien no tenga ninguna. Y quien tenga provisiones de más, que se las lleve a quien no tenga ninguna.- Así fue mencionando todas las diversas clases de bienes o riqueza hasta que vimos que ninguno de nosotros tenía derecho a tener nada de más habiendo alguien necesitado de ello. (Lo relató Muslim)
(Hadiz número 345 de Lo más granado de los Jardines de los Justos, del imam An-Nawawi. Traducido al español por Zakaríya Maza Al-Qurtubí)
Despúes de comentarte un parrafo entero se me ha borrado jejeje.
ResponderEliminarLa gente va a su aire y a veces no vemos las grandes personas que estan cerca o que con el más minimo detalle se las puede hacer feliz, prestando ayuda o dandoles una sonrisas o palabras de apoyo.
Un besazo corazón
Qué mal nos sienta cuando escribimos mucho y se nos borra...
EliminarEs importante ayudar, primero por generosidad y solidaridad, y segundo porque la vida da muchas vueltas y nadie puede saber si el día de mañana seremos nosotras quienes necesitemos ayuda.
Besos
Me encanta ese hadith qu ehas puesto e intento tenerlo siempre presente. Es muy cierto lo que comentas, yo no tengo apenas trato con mis vecinos, con los de un lado solo hemos tenido problemas por el ruido que hacen (pareja joben con ganas de fiesta) y con los otros tenemos una relacion cordial pero distante. es lo que la gente quiere, no quieren que te metas mucho en su vida y no quieren saber si necesitas algo o no. En fin es lo que tenemos en esta sociedad en las grandes ciudades (y cuanto mas grandes peor, no quiero recordad como vivia cuando estaba en Barcelona o Madrid los empujones que recivia en el metro por ejemplo).
ResponderEliminarEn las ciudades grandes parece que la gente se vuelve invisible.
EliminarMe dan mucha pena las noticias de cuando encuentran a alguien que ha muerto en su casa hace semanas y pienso que cómo es posible que en todo ese tiempo nadie le haya echado de menos. Es muy triste.
Waleikom salam! A mi Tmbién me entristece mucho esta forma de vida individualista, yo la he vivido desde que nací por so me sorprendí cunado viajé a marruecos por primera vez y vi que allí todo era diferente, por ejemplo si alguien fallece todo el barrio se vuelca con esa familia proporcionándoles comida durante tres días y cualquier tipo de ayuda, aquí es posible que ni se enteren que te ha pasado algo. Besos!
ResponderEliminarY.
Se están perdiendo las buenas costumbres.
EliminarBesos
He llegado a tu blog a traves del blog: PORQUE SOY MUSULMANA, y te sigo. Me encantan sua mensajes y comparto de ellos.
ResponderEliminarbesos desde Uruguay
Bienvenida.
ResponderEliminarAgradezco mucho tu visita y tus palabras. Y me alegra saber que compartimos los mismos mensajes.
Espero que nos sigamos leyendo.
Saludos
cuando leo estas cosas me alegro mucho de vivir en un pueblo, grande pero pueblo y aunque a veces me fastidie tardar media hora de casa a la esquina porque vas saludando a todo el mundo, vale la pena perder un poco de tiempo e intentar estar con quien lo necesita ...
ResponderEliminargracias por acercarnoslo y por hacer que conozca este hadiz,se que sabes que soy cristiana podrías explicar que es un Hadiz para los que caemos aqui y no lo sabemos (se que lees esto antes de publicarlo si crees que te meto en veredas por ser mucho trabajo borralo y lo de los parentesis porfa borralo, si estos mensajitos te molestan porque te doy trabajo dimelo)
Yolanda
Lo siento Yolanda, pero no he podido borrar lo del paréntesis, no me ha dejado, o yo no he sabido hacerlo...
EliminarMe apunto como tarea pendiente una entrada para explicar estas cositas, te agradezco la sugerencia porque es verdad que no todo el mundo tiene que saber de qué estoy hablando. Pero en vez de contestarte aquí, escribo una entrada y así lo puede ver otra gente.
Y me alegro de que vivas en un lugar en el que la gente todavía se para para saludarse y hablar.
Besos
A mí tb me encanta el blog de Raquel! Tienes tanta razón... lo fácil y divertido es establecer relaciones superficiales, lo satisfactorio es lograr que se vuelvan profundas.
ResponderEliminarLo siento Estrella, este comentario cayó como spam y no lo he visto hasta ahora.
EliminarCreo que a veces nos da miedo implicarnos.